Los símbolos de la tabla periódica están compuestos por una o dos letras. En ellas los químicos ven elementos, y Juan Romeu, lingüista de 31 años, también normas ortográficas: su tabla periódica de la ortografía se ha colado en la portada del agregador de noticias Menéame durante el fin de semana y, en Facebook, se compartió unas 2.500 veces en 48 horas.
[Mira aquí en detalle todos los elementos de esta tabla periódica de ortografía, elaborada por sinfaltas.com]
La tabla conserva las denominaciones de la tabla periódica original y añade una breve descripción de una norma ortográfica a cada elemento. “Yo me muevo bastante por internet y sabía que las tablas periódicas llaman mucho la atención y funcionan muy bien”, cuenta Romeu por teléfono a Verne, “así que ya lo tenía en la cabeza. Además, justo me topé con una foto de cuando iba al colegio y detrás de un amigo salía una tabla periódica, y al verla me di cuenta de que muchos elementos cuadraban perfectos con temas ortográficos”.
Romeu, filólogo que ha trabajado en la RAE como editor de la Nueva Gramática, tardó algo más de una semana en completar su versión de la tabla. “Lo más complicado ha sido obligarme a condensar los comentarios de cada elemento para que ocuparan muy poco pero fueran comprensibles”, cuenta. Además, el trabajo ha sido un poco más largo de lo que hubiera sido hace un mes: “Comencé poco después de leer que habían incluido cuatro elementos más”.
La imagen de la tabla fue publicada por Romeu en el blog de Sin Faltas, una startup de edición y corrección de texto para empresas en la que trabaja. Debido al tráfico provocado por Menéame, la página ha sufrido caídas intermitentes durante todo el fin de semana. “El sábado vimos que estaba caída y teníamos una boda”, cuenta Romeu, “así que la dejamos. Ni yo como administrador podía entrar”.
Para Romeu, parte del éxito de su post -y uno de los motivos por los que comenzaron el proyecto de Sin Faltas- se debe a que “la ortografía y la lengua están de moda”. “Hay quien dice que las redes sociales son un peligro para la lengua”, explica, “pero yo creo que es al contrario: gracias a ellas escribimos más que nunca, prácticamente todos escribimos todos los días, y hay que aprovecharlo“.
Fuente: elpais