Ryan Jessen, de 33 años, quien en apariencia era un joven saludable en California, comenzó a sentir fuertes dolores de cabeza; y creyendo que se trataba de migraña, acudió al hospital para que le recetara algo que le mitigara el dolor.
Pero no se trataba de un simple dolor de cabeza: tenía una hemorragia cerebral ventricular, por lo que ingresó de emergencia. Sin embargo, el estado de Ryan empeoró, como cuenta su hermana Michelle, hasta entrar en estado de coma.
Tristemente el diagnóstico de los médicos fue fatal. Ryan ya no despertaría jamás, y solo se le estaría prolongando la vida de forma artificial.
Así que la familia decidió lo inevitable, no sin antes convertir a Ryan en donador de órganos y pedir un permiso especial al hospital: permitirles que Mollie, la adorada perrita boxer de Ryan, pudiera entrar a despedirse de su amigo.
Michelle estuvo informando constantemente a través de su cuenta de Facebook sobre los acontecimientos, y también dando algunas advertencias:
“Él pensó que tenía migraña, pero era una hemorragia cerebral ventricular. Creen que fue provocada por la presión arterial alta, y hay especulaciones de que su consumo frecuente de bebidas energéticas puede haber contribuido”.
Luego que el hospital lo autorizó, se realizó el conmovedor encuentro de Ryan y Mollie…
“El hospital hizo la cosa más dulce por nosotros, y nos permitió llevar a la perra de mi hermano para que se despidiera de él; así ella podría saber por qué su humano nunca volvería a casa. Si conocieron a mi hermano, saben que él realmente amaba a esta dulce perra”.
El padre le dice a Ryan que ahí está Molly y que se despida de ella…
Luego de las despedidas, se tomó la decisión: desconectar a Ryan y permitirle que muriera…
También a través de Facebook, Michelle dio a conocer que el corazón de Ryan fue donado a un chico de 17 años, quien ahora tendrá la posibilidad de vivir.
“Me encantaría que Ryan supiera la diferencia que su corazón hará en el cuerpo de ese jovencito”
Luego de agradecer a quienes han ido siguiendo esta historia a través de Facebook, Michelle mandó un mensaje para quienes estaban preocupados por el futuro de la perrita:
“No se preocupen por la perra, nosotros la cuidaremos. Ella es parte de la familia”
Fuente: laguiadelvaron