Actualmente y lamentablemente la palabra que más escuchamos con frecuencia es ¨bullying¨, el cual se define como el acoso físico o psicológico al que someten de forma continuada a  un alumno sus compañeros.

Millones de niños  alrededor del mundo son los afectados y todo se atribuye a la educación que niños y jóvenes reciben principalmente en el hogar, sus vivencias y el fomento de valores.

Este tipo de violencia escolar se caracteriza por una reiteración encaminada a conseguir la intimidación de la víctima, implicando un abuso de poder en tanto que es ejercida por un agresor más fuerte, sea fortaleza real o percibida subjetivamente.

El sujeto maltratado queda expuesto física y emocionalmente ante el sujeto maltratador, las consecuencias podrían ser  secuelas psicológicas, que el acosado viva con terror, que no quiera asistir más a la escuela, que sufra de nervios, caiga en depresión y se muestre solitario.  Incluso, existe un registro de casos extremos que han recurrido al suicidio.

Muchos padres ignoran las señales que les muestran que sus hijos están sufriendo de este acoso o simplemente les resultan muy complicadas, llegan a creer que el chico exagera y que sólo se trata de algo ¨normal¨ que se ve en casi todas las escuelas pues siempre en cada aula existe el niño o joven que disfruta de molestar a sus compañeros.

Es por eso que reconocemos la inteligencia de este padre para enfrentar a los agresores su hijo, si quieres saber cómo paró el acoso que los jóvenes ejercían sobre el chico, te invitamos a ver el siguiente vídeo:

No nos queda la menor duda que es un padre admirable y que ha sabido encontrar la manera más correcta y adecuada para frenar esta desagradable situación. El apoyo y la confianza que los padres les dan a los hijos ayuda muchísimo, pues esto le propicia mayor seguridad al niño o al joven a decirte aquello por lo que atraviesa. ¡No olvides prestarles atención y escucharlos!

COMPARTE esta idea de acabar con el bullying con más padres. 🙂

Fuente: porquenosemeocurrio