Las frutas y las verduras contienen unos antioxidantes llamados flavonoides, que son el mayor grupo de fitonutrientes que, junto con los carotenoides, son responsables de los colores vivos de las frutas y verduras.
Una clase de antioxidantes encontrados en las naranjas, las limas y los limones pueden ayudar a prevenir los efectos nocivos de la obesidad, según un experimento realizado con ratones alimentados con una dieta alta en este tipo de frutas cítricas. Los resultados de la investigación -llevada a cabo por científicos de la Universidad Estatal Paulista (Brasil) han sido presentados en el National Meeting & Exposition of the American Chemical Society (ACS).
“Nuestros resultados indican que en el futuro podemos utilizar flavanonas cítricos, una clase de antioxidantes, para prevenir o retrasar enfermedades crónicas causadas por la obesidad en los seres humanos”, explica Paula S. Ferreira, coautora del trabajo.