El prototipo Scorpion-3, de Hoversurf, es un vehículo de un solo asiento que se eleva en el aire propulsado por cuatro hélices.
Los coches voladores y su versión sobre dos ruedas son vehículos con los que el ser humano lleva soñando desde hace mucho tiempo; y la literatura y el cine de ciencia ficción han sabido plasmar muy bien ese deseo. Todos aquellos que nos hemos imaginado alguna vez pilotando la potente Speeder bike de Star Wars, sobrevolando literalmente el asfalto, estamos algo más cerca de hacer realidad nuestro sueño gracias a la start up Hoversurf y su Scorpion-3.
Se trata de un prototipo de aeronave de un solo asiento que combina el diseño de una motocicleta estándar con la tecnología propia de un dron, ya que se eleva en el aire propulsado por cuatro hélices –lo que proporciona, tanto a pilotos profesionales como a amateurs, una gran estabilidad de vuelo–.
Está equipada con un sistema de seguridad accionado por controladores de vuelo de última generación, con limitación de velocidad y altitud asistida por ordenador para evitar accidentes. En este sentido, puede alcanzar casi los 50 km/h de velocidad y una altura de unos 10 metros. Asimismo, cuenta con autonomía para permanecer en el aire aproximadamente 27 minutos.
Sus ingenieros han buscado dotar al vehículo de maniobrabilidad y, para ello, el tripulante tiene el control de la máquina: puede surfear los cielos variando la altitud y la dirección con los mandos.
La compañía explica que, a día de hoy, tal vez la Scorpion-3 sea vista más como un instrumento para practicar deportes extremos que como un medio de transporte, pero su potencial en este sentido resulta “evidente”, apuntan. Su precio será de unos 150.000 dólares (aproximadamente 142.00 euros).
Si quieres ver cómo funciona, aquí te dejamos este vídeo:
Fuente: muyinteresante