El talento de este pequeño niño de tres años te dejará sin aliento. Con sus cachetitos redondos, voz suave y la ternura que sólo un bebé infunde, cautiva a la multitud y los jueces tan pronto comienza la música. Con cada paso, su pequeño cuerpecito se adueña del gigantesco escenario, pero lo mejor es cuando le preguntan: “¿Por qué bailas?” Su respuesta te robará una lágrima. ¡No te pierdas esta hermosa historia!
Este pequeño se llama Zhang Junghao y con tan sólo tres años se llevó la noche y la ovación de un público cautivado.
Era imposible resistirse a los encantos de este hombrecito, tan sólo llegando al escenario ya le había robado los corazones a todos.
El compañero de Zhang es una enorme bocina a la cual llama “bebé”, como si fuera un muñeco de felpa… ♥
Por medio del control remoto que Zhang le dio a los jueces, éstos podían controlar la música de su acto “Baile aleatorio”. Este pequeño no teme a ningún género musical 😉
Pronto la ternura se volvió asombro cuando este pequeño comenzó a bailar como todo un profesional… ¡En esta imagen vemos al afamado actor de Hollywood Jet Li lleno de sorpresa!
El jurado de este show, Amazing Chinese (o Chinos Asombrosos), está compuesto la actriz Cai Ming (muy afamada en su patria), el comediante Zhou Li Bo (Que debe ser muy bueno en su trabajo, es el único que le causa gracia a este pequeño niño) y Jet Li, seguro que lo reconoces.
Al terminar las ovaciones no se hicieron esperar, y tanto el público como los jueces quedaron completamente encantados con el desempeño de este pequeño. ¡Pero lo mejor aún estaba por venir!
Los jueces comenzaron a indagar en la breve historia del pequeño Zhang, con preguntas como “¿Estás asustado?” A lo que él respondió con toda seguridad “No”. Pronto les explicó la conmovedora razón por la cual bailaba con tanta alegría…
“[Bailo] porque me gusta bailar…Cuando bailo mi mamá ríe. Mamá dice que reír es felicidad. Mi sueño es hacer a la gente feliz porque yo soy feliz, ¿Eres tú feliz?” Respondió con toda elocuencia el pequeño Junghao a los cuestionamientos de los jueces, quienes quedaron asombrados y conmovidos.
A veces no hace falta tener los argumentos más fuertes o el mayor número de votos, ni pelear por tener la razón. El pequeño Junhao nos enseña que para que un mensaje penetre efectivamente a una multitud, es necesario hablar (y bailar) con el corazón.
Comparte el mensaje de este pequeño con todos, ¡Ayúdalo a cumplir su noble sueño!
Fuente: viralistas