La mujer de 72 años mató, junto con su cómplice, miles de animales con gran crueldad con el fin de ahorrar dinero.
La horrible historia se remonta a un crimen que fue cometido entre enero de 2009 y octubre de 2010, que condujo a la masacre de 2.100 animales sanos por la supuesta asociación de protección de animales en Torremolinos, Málaga. Ellos inyectabam sin ningún tipo de anestesia, medicamentos para la eutanasia, y para ahorrar dinero no daban la dosis requerida para que la muerte fuese rápida y eficaz, así que la muerte de los animales era lenta y dolorosa.
La presidenta de la supuesta asociación, Carmen Marín Aguilar, mató a miles de perros y gatos.
Los fiscales acusan a las dos personas de asesinar a unos 2.183 animales entre enero de 2009 y octubre de 2010, cuando el macabro hallazgo salió a la luz durante una inspección de las autoridades en el sitio.
El Juzgado de lo Penal de Málaga ha condenado a Carmen Marín Aguilar, de 72 años, a tres años y nueve meses de cárcel por matar a cientos de perros y gatos y a pagar una multa de 19.800 euros por los delitos de maltrato a animal doméstico y falsificación de documentos. Su complice, Felipe Barco Gámez, ha sido castigado con una pena de un año de cárcel y una multa de 3.600 euros.
Una de las evidencias encontradas en contra de la pareja se refiere a la forma en que trataron de ocultar los crímenes: apagaban las cámaras de videovigilancia y aumentaban el sonido de la música para que no se escuchara el sufrimiento de los animales.
El refugio era utilizado también como peluquería, residencia y clínica para animales, aunque Marín Aguilar ni si quiera tenía el título de veterinario.
Fuente: likemag