Cuando Kevin Elliott fue asesinado, victima de una emboscada Talibán en Afganistán, su mejor amigo Barry Delaney cumplió la promesa que le había hecho. Algo que resultó extraño y atrajo muchas miradas, pero fue un acto de verdadera amistad. Sin importar lo que otros pudieran pensar, Barry asistió al funeral de su querido amigo, ¡Vestido así!
3 años antes de la muerte del soldado británico Kevin Elliott, él y su amigo hicieron un pacto: Si Elliott moría en combate, Delaney usaría un vestido en su funeral (cuanto más llamativo, mejor).
Durante el funeral, nadie se atrevió a decir ni una palabra acerca del atuendo de Barry, aunque sí hubieron algunas miradas curiosas.
Delaney hizo su mayor esfuerzo para controlar su tristeza. 
Pero cuando se agachó a preguntarle a Elliott si le gustaba su atuendo, colapsó en llanto. Dándose cuenta de que su amigo jamás respondería…
Para muchos puede parecer una tontería, pero ¿Cuántos de nosotros estaríamos dispuestos a cumplir un pacto así? Esta historia nos recuerda lo que significa la verdadera amistad. Yo admiro lo que hizo Barry. 
Comparte la gran hazaña que este hombre hizo por su amigo.