El crimen ha conmocionado Brasil
La cantante ya había avisado de que su vida corría peligro. Lo hizo en una de sus últimas entrevistas, en la que aseguró que estaba recibiendo amenazas de muerte. Esa era la razón, decía, que la había llevado a apartarse de los escenarios.
Y al final sucedió.
Durante la noche del pasado 19 de enero, Braz fue asesinada tras ser víctima de un robo.
Según la policía de Río de Janeiro, dos hombres armados irrumpieron en el hostal de la cantante, donde ella misma residía durante sus estancias en Brasil. Mientras Braz se encontraba retenida, los sospechosos robaron unos 15.000 reales (alrededor de 4.700 dólares) y se llevaron objetos de valor de la cantante.
Loalwa fue golpeada y amenazada con una arma blanca y, finalmente, los supuestos criminales la metieron dentro del maletero del coche que usarían para la fuga. Más tarde, en mitad de la huida, el motor del vehículo empezó a fallar y los sospechosos abandonaron el coche, no sin antes prenderle fuego.
La policía encontró el cuerpo sin vida de la cantante en el maletero del vehículo, junto con una bombona de gas.
La investigación que llevan a cabo las autoridades de Río ha acabado con la detención de tres sospechosos, de entre 18 y 23 años. Según fuentes policiales, uno de los tres hombres era empleado del hostal en el que se alojaba la cantante, el cual podría haber facilitado la entrada a sus otros dos compañeros.
Según la Policía Civil del Estado de Río de Janeiro, el comportamiento del trabajador de la posada durante los interrogatorios, que habría confesado su participación en los hechos, “fue incompatible, realmente, con la naturaleza humana. Una persona que no demostró ningún tipo de arrepentimiento por la práctica de un crimen tan bárbaro”.
Loalwa inició su carrera a los 13 años y en los años 80, con el ritmo de la ‘lambada’, llegó su época dorada. Braz saltó a la fama con el mítico tema Chorando Se Foi. Vendió unos 30 millones de discos y obtuvo unos 80 discos de oro y plata.
Fuente: playgroundmag