Que extraños y masoquistas somos los seres humanos, de eso no me queda la menor duda, pues la gran mayoría pasamos toda nuestra vida buscando nuestra otra mitad, alguien que nos ame profundamente y nos haga felices, pero lo cierto es que, todos somos seres completos, no somos mitades y tampoco necesitamos que alguien nos haga feliz, más bien necesitamos en nuestra vida a personas para compartir nuestra felicidad. Sin embargo no acabamos por comprenderlo de este modo.
Más irónico es que muchas veces esas personas que hará nuestro mundo diferente con su amor están precisamente justo frente a nosotros o las hemos tenido toda una vida a nuestro lado pero somos tan ciegos que terminamos ignorando a aquellos que nos aman, ¿por qué será?
Esto no sólo se simplifica a una pareja pues muchas veces tampoco somos capaces de valorar a nuestra familia, misma que siempre estará para nosotros incluso cuando todos los demás se vayan.
A nuestros amigos, esos hermanos que termina eligiendo el corazón y porque no, a nuestros fieles y leales amigos de cuatro patas, esos pequeños seres que nos dan infinito amor sin pedir nada a cambio, incluso dan mucho más cariño, amor y momentos inolvidables que un mismo ser humano. Para muchos estos amiguitos no cuentan, no tienen valor ni cabida en su vida y no saben del amor tan puro que se están perdiendo, definitivamente.
¡Abramos los ojos! Démosle a cada uno el lugar y valor que merecen. Amémoslos a tiempo antes de que el destino nos los arrebate. Apreciemos y atesoremos cada momento que con nosotros comparten, pues a veces para recuperar el tiempo ya es muy tarde.
A continuación te mostraremos en el siguiente vídeo una hermosa y conmovedora historia de un monje y un perro, esperando quede en ti una reflexión:
Nunca olvides los principios básicos: amor y humanidad, si todos los tuviéramos muy presentes en nuestro día ¿puedes imaginarte como sería el mundo?
COMPARTE esta hermosa reflexión con tus conocidos y no olvidemos amar a aquellos que nos entregan amor infinito.
Fuente: porquenosemeocurrio