- La niña y su madre llegaron 4 minutos tarde a la cita
- La doctora fue suspendida seis meses de empleo y sueldo pero ha vuelto a ejercer
Ellie-May Clark, una niña británica de 5 años, murió de un ataque de asma después de que su médico, la doctora Joanne Rowe, no la atendiera por llegar cuatro minutos tarde a su cita.
Ellie-May tenía una cita con la doctora Rowe, de 53 años, en su clínica local en Newport, en el sur de Gales, en Reino Unido. Su madre Shanice explica que llegaron cuatro minutos tarde a la cita y les mandaron de vuelta a casa con una nueva cita para el día siguiente por la mañana.
Según el informe del Servicio Británico de Salud, después de que madre e hija se fueran, otro doctor cuestionó la decisión de la doctora Rowe al decirle a la recepcionista que “no podemos cambiar las citas de urgencias”, señala Mail on Sunday.
Ellie-May dejó de respirar poco después cuando se fue a la cama y murió esa misma noche de un ataque de asma, informa The Mirrror.
Según el informe, la negativa de la doctora Rowe de ver a Ellie-May fue “la causa principal” de su muerte y añade que “no hizo ningún diagnóstico clínico de emergencias antes de rechazar verla”, además de no dar a la madre “ningún consejo de seguridad”, publica Mail on Sunday.
Meses antes, la doctora fue advertida por un pediatra de que Ellie-May podría sufrir un ataque de asma “peligroso para su vida”.
La doctora explicó después que estaba “en mitad” de una sesión con otro paciente pero, según el sistema informático de la clínica, no tenía ningún caso, según publica Mail on Sunday.
La doctora fue suspendida durante seis meses de empleo y sueldo después de la muerte de Ellie-May en enero de 2015.
Al finalizar la suspensión se realizó una audiencia del Consejo Médico General sobre su aptitud para practicar nuevamente la medicina. Se realizó a puerta cerrada. Las audiencias, que son normalmente públicas, pueden celebrarse en privado cuando un médico acuerda por adelantado aceptar un castigo. La Dra. Rowe aceptó una advertencia por escrito y prometió no repetir su comportamiento. Sigue ejerciendo la medicina.
La abuela de Ellie-May señala que “nunca recibimos una disculpa de la doctora Rowe, que se fue dando una palmada a su muñeca después de que su actitud matara a nuestra preciosa niña”.
Fuente: telecinco