Ya existe una alternativa a los asilos en Estados Unidos y Europa, ¿qué es el cohousing? Se trata de las viviendas colaborativas y autogestionadas donde comunidades de adultos mayores deciden unirse para compartir y disfrutar de espacios comunes manteniendo la independencia en sus propias casas.
En la década de los ’80, la población europea comenzó a implementar el estilo de vida cohousing o covivienda; la iniciativa fue ideada por jóvenes en Dinamarca. Consiste en vivir de manera comunitaria pero con vivienda independientes, complementadas por áreas comunes donde los vecinos comparten servicios, actividades sociales, comedores, conciertos, juegos de mesa, parrilladas, etc. El Cohousing es planeado por un grupo de personas (amigos, conocidos, miembros de una junta de vecinos) y son ellos quienes deciden comprar un terreno en conjunto, lotearlo y construir pequeñas casas básicas y económicas. El proyecto es muy exitoso, y hoy se está aplicando en distintas regiones del mundo.
¿Por qué a la gente le gusta tanto este sistema? Porque pueden conservar su independencia, además pueden disfrutar de la vida con amigos. Este sistema les permite vivir su madurez con vitalidad lejos de la soledad y formar un espacio de pertenencia tan importantes para la salud y bienestar humana.
“Queríamos envejecer junto a nuestros amigos. Hemos tenido la experiencia amarga de nuestros padres, hemos visto cómo en su vejez estaban muy solos. Aquí es al revés: lo difícil es cruzar un pasillo y no hablar con alguien, lo difícil es que no haya nada que te apetezca hacer”, explican José María y María Dolores, ambos viven en un cohousing en Salamanca.
“La vejez acecha cuando no tienes nada que hacer. Estar ocupados nos mantiene activos y en forma”, dice Jaime Moreno, adulto mayor que vive también en un cohousing de España, agregando que “aquí impera la solidaridad”.
El Cohousing revitaliza a los adultos mayores ya que fomenta la colaboración, la participación, el liderazgo y las ganas de crear, fomenta también la integración social, la colaboración entre vecinos, la sostenibilidad, los pasatiempos, entre tantos otros beneficios relacionados con el compañerismo y los lazos sociales.
“Ni hablar, al asilo no”
Es el grito que han comenzado a pronunciar los mayores españoles. Los asilos son lugares por lo general impersonales, donde el grado de dependencia es alto y donde todo está pautado. Además, muchas familias no pueden permitirse pagar esos lugares: una residencia privada puede a costar unos 2.000 euros al mes, y optar a una plaza pública es difícil. La prueba de ese cambio de mentalidad es que más de la mitad de los españoles mayores considera poco probable terminar en un centro geriátrico, según un estudio realizado por la Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados de España (UDP), una organización que agrupa a asociaciones de mayores de toda España. A los ancianos españoles el cohousing les parece la opción más deseable de pasar sus últimos años.
Aquí les dejo dos vídeos:
Este artículo ha sido obtenido a través de Muhimu.es , ¿todavía no los conoces? Muhimu es un espacio virtual que busca acceder a nuestro lado más humano, un proyecto donde descubrir, compartir y encontrarnos a nosotros mismos… ¡desde AldeaViral queremos darles las gracias! – El autor original de este artículo es Napo Devesa , licenciado en filosofía y fotógrafo profesional, interesado por el estudio de los nuevos movimientos sociales, en especial por el movimiento ecologista.
¿Qué te pareció esta idea? ¿Existen estos proyectos en tu ciudad? ¿Te gustaría vivir en un Cohousing? Cuéntanos tu experiencia.
Fuente: muhimu