En el planeta Tierra conviven un gran número de especies diferentes, siendo el ser humano la más importante de todas ellas. Debemos aprender a convivir con nuestros medio, es decir, hay que respetar el ecosistema y no dañar a los seres que lo habiten. ¿Acaso no hay nada más bonito que ver un paisaje natural al atardecer? La edificación excesiva y la destrucción de esos parajes está convirtiendo nuestro mundo poco a poco en algo terrible. Es deber de las autoridades concienciar a la población y frenar a las compañías que están acabando con la Tierra.
Como bien sabemos hay 5 continentes en nuestro planeta, aunque algunos también señalan a La Antártida como una de estas vastas regiones. Hagamos un repaso: América, Asia, Europa, Oceanía y África son zonas llenas de vida y de ecosistemas fantásticos, tanto que incluso nos sorprenderíamos si llegáramos a verlos en profundidad. Dar la vuelta al mundo es algo que solamente está al alcance de los ricos, por lo que a veces no llegamos a conocer individuos como el que veremos a continuación: su color te sorprenderá bastante…
No todos los seres humanos somos iguales. Esta es una afirmación que quizá traiga algo de polémica, ya que muchos afirman que todas las personas son idénticas. Es cierto que todos deberíamos tener los mismos derechos y libertades, pero por desgracia las regiones y países en las que vivimos son diferentes, por lo que nuestra vida para nada es la misma. En el mundo hay dos o tres zonas bastante diferenciadas: el mundo desarrollado, los países en vías de industrialización y el tercer mundo; debemos trabajar para que las diferencias entre ambos se reduzcan.
En el primer mundo parece ser que todo es felicidad, ya que la inmensa mayoría de ciudades y municipios están completamente desarrollados, aparte de poseer una tecnología puntera. Es en estos países donde realmente se mueve casi todo el dinero que circula por el mundo, por lo que deben ayudar a otros estados a alcanzar esa situación. Otras zonas del mundo son bastante más desconocidas para nosotros, como algunas regiones de África y Asia; allí podemos conocer a individuos tan sorprendentes como este…
Solamente existe una raza humana; el color de piel no determina si perteneces a una estirpe determinada o a otra. El planeta Tierra es realmente vasto, por lo que si viajamos a diferentes continentes podremos ver en primera persona las diferencias entre los seres humanos. Y es que el mundo existen personas de tez blanca, negra, amarillenta, mestiza… No debemos discriminar a nadie por el color de su piel; el racismo y la xenofobia son dos males que hay que erradicar de inmediato.
África es mal llamado por muchas personas “El Continente Negro”. ¿A qué se debe esto? Pues principalmente a que la tez de muchos de sus habitantes es bastante oscura. No siempre es así, ya que el color de piel de los ciudadanos del norte de África es bastante diferente al que poseen los que habitan el centro y el sur del continente. Si viajamos a todos y cada uno de los países que se encuentran bajo el desierto del Sáhara nos daremos cuenta de que la tez de este gente es de un color marrón intenso. ¿Pero puede llegar alguien a ser negro del todo? Este niño sí…
En el año 2013 circuló por toda la red una fotografía que creó una gran controversia en los usuarios. Esta imagen incluía a un bebé con la tez más negra incluso que el carbón, lo que llevó a muchos a pensar que solamente se trataba de un muñeco o una edición de Photoshop. Cuál fue su sorpresa al saber que realmente era un niño; parece ser que la genética ha vuelto a darnos una sorpresa muy especial. Sabemos que hay gente con la piel oscura, ¿pero tanto? Todo el mundo quería conocer más de cerca a ese bebé…
Sudáfrica es el país de origen de este niño; todos sus habitantes se sienten orgullosos de él, ya que podría decirse que es una nueva atracción para visitar el país. ¿Quién dice que las personas de tez oscura no son bellas? Solamente había que ver a este bebé; uno de los detalles más importantes acerca de su apariencia es que incluso sus globos oculares son de color negro. Aunque en un principio no fue aceptado por su familia pronto vieron que lo que realmente había llegado a casa era un enorme presente, por lo que le pusieron de nombre Edam, “Regalo de Dios”. ¿Cómo luce en la actualidad? Pues fenomenal. Tenemos una imagen que lo corrobora…
Evidentemente han existido personas que se han sorprendido una enormidad al conocer a Edam, pero finalmente se han dado cuenta de que es una verdadera maravilla de la naturaleza. Por lo que podemos ver en la imagen, este niño no sufre síntomas de malnutrición ni tampoco lleva una vida llena de penalidades; está creciendo sano, fuerte y rodeado de otros chicos de su edad. Sus cuidadoras afirman que es adorable y que sienten un cariño especial por él; le deseamos el mejor de los futuros.
Fuente: paraloscuriosos