Resulta que abrazarse no solo es agradable sino también saludable. Los múltiples efectos positivos en el cuerpo y la mente humana desde hace tiempo fueron estudiados y comprobados por los científicos.
Queremos recordarte por qué los abrazos son buenos.
Los abrazos que duran 20 segundos o más tienen un efecto terapéutico que influye de manera positiva en nuestro organismo y nos ayuda a resistir las enfermedades.
Los abrazos brindan apoyo y cariño, por lo cual, ayudan a evitar el deseo de reponer la falta de amor y llenar el vacío con comida sabrosa.
Reducir los niveles de estrés y los procesos inflamatorios en el organismo retrasan el proceso natural del envejecimiento.
Los abrazos mejoran el ánimo y te cargan de energía para tener un día eficiente.
Un organismo cargado de energía positiva seguramente superará todas las dificultades y encontrará la solución a los problemas complicados.
Durante los abrazos se libera la hormona oxitocina que nos llena de alegría y fortalece el vínculo emocional entre las personas.
Los abrazos no solo reducen la producción de la hormona del estrés cortisol, sino también aumentan la liberación de serotonina, la cual se relaciona directamente con un buen estado de ánimo y hace que uno se sienta feliz. Todo esto ayuda a que el sistema nervioso se calme, así como también mejora el estado emocional.
Los abrazos no solo tranquilizan el corazón sino también el sistema nervioso. Al abrazarse uno al otro, relajamos los nervios y nos quitamos la tensión y el estrés de encima.
Durante los abrazos nos sentimos protegidos. Los miedos nos preocupan mucho menos así como la opinión de los demás. Esta reacción está en nosotros a nivel de instintos e incluso cuando no nos damos cuenta, nos ayuda en diferentes situaciones.
Los abrazos son una forma universal de expresar en cualquier idioma amor, cariño y apoyo a un ser querido.
Fuente: genial.guru